En la mañana del martes del 13 de abril de 2021, antes de iniciar el santo rosario nuestra colaboradora Isabelita Hernández se refirió, como en anteriores sesiones, al santo del día.
La Iglesia celebra a san Martín I, fue el Papa núm. 74 de la Iglesia católica entre los años 649 a 655, venerado como santo por la Iglesia católica, así como también por la Iglesia ortodoxa. En Constantinopla fue juzgado de los cargos de herejía y enemigo del Estado (hechos que no eran ciertos) siendo condenado a muerte. Tras tres meses de prisión, el emperador le conmutó la pena de muerte por la de exilio en Crimea, donde llegó en una situación física tan deplorable debida al maltrato sufrido desde su detención, que falleció. Por este motivo se le considera mártir.
A él le encomendamos la salud de los enfermos de la pandemia y todos los demás enfermos, además de nuestras intenciones particulares y las intenciones del Santo Padre actual.
Contemplaremos, siendo martes los MISTERIOS DOLOROSOS
El Papa Francisco en el discurso precedente a la bendición Urbi et Orbi del Domingo de Resurrección, el 4 de abril pasado, dedicó unas palabras a los numerosos problemas que agravan a la humanidad, entre ellos la pandemia, las guerras, la carrera armamentística, etc.
Por ello, en cada misterio, invocaremos un resumen de esas peticiones y preocupaciones del Santo Padre.
Para el primer misterio, La oración y agonía de Jesús en el Huerto de Getsemaní, el papa Francisco dice: “La pandemia todavía está en pleno curso, la crisis social y económica es muy grave, especialmente para los más pobres; y a pesar de todo —y es escandaloso— los conflictos armados no cesan y los arsenales militares se refuerzan”.
Para el segundo misterio, La flagelación de Jesús, el papa Francisco dice: “Dios Padre resucitó a su Hijo Jesús porque cumplió plenamente su voluntad de salvación: asumió nuestra debilidad, nuestras dolencias, nuestra misma muerte; sufrió nuestros dolores, llevó el peso de nuestras iniquidades. Por eso Dios Padre lo exaltó y ahora Jesucristo vive para siempre, es el Señor”.
Para el tercer misterio, La coronación de espinas de Nuestro Señor, el papa Francisco dice: “Que el Señor dé consuelo y sostenga las fatigas de los médicos y enfermeros. Todas las personas, especialmente las más frágiles, precisan asistencia y tienen derecho a acceder a los tratamientos necesarios”.
Para el cuarto misterio, Jesús con la Cruz a cuestas, el papa Francisco dice: “Que el Señor inspire la acción de las autoridades públicas para que todos, especialmente las familias más necesitadas, reciban la ayuda imprescindible para un sustento adecuado. Desgraciadamente, la pandemia ha aumentado dramáticamente el número de pobres y la desesperación de miles de personas”.
Para el quinto misterio, La crucifixión y muerte de Nuestro Señor, el papa Francisco dice: “A la luz del Señor resucitado, nuestros sufrimientos se transfiguran. Donde había muerte ahora hay vida; donde había luto ahora hay consuelo. Al abrazar la Cruz, Jesús ha dado sentido a nuestros sufrimientos. Y ahora recemos para que los efectos beneficiosos de esta curación se extiendan a todo el mundo”.
SEPTIMO COMENTARIO DEL CATECISMO DE LA IGLESIA CATÓLICA: ORACIÓN DEL PADRENUESTRO.
Breve introducción
La oración del Padrenuestro es la oración universal de los cristianos, que nos enseñó el mismo Jesús. Y con las mismas palabras la vamos repitiendo a lo largo de los siglos y años, y que así sea.
En ella se plasma la filiación divina, por la que nos dirigimos al Padre Dios como HIJOS, engendrados por el mismo Cristo, ni biológicos ni adoptados: engendrados.
El COMPEDIO de la Iglesia Católica, le dedica una sección entera, de los puntos 578 a 598, de la segunda de la Cuarta Parte dedicada a la Oración cristiana. En el Catecismo las enseñanzas son más amplias.
Si la Iglesia Universal nos ofrece muchas enseñanzas sobre esta oración, hemos de entender que es una oración muy importante para nosotros los cristianos y para el crecimiento y preservación de la Iglesia.
La Oración
Antes de iniciar el desarrollo teológico del Padrenuestro, el Compendio nos explica qué es la Oración en general, la Revelación divina de la oración. El modelo de oración en el Antiguo Testamento, desde Moisés a los profetas y la importancia de los Salmos, hasta llegar a Jesucristo en el que la oración revelada se realiza en el mismo Jesucristo. Una vez concluida la redención, nos enseña la oración en el tiempo de la Iglesia, las expresiones de la oración, el combate personal y de vida interior para rezar.
Jesús nos enseñó el Padrenuestro, pero también nos enseñó a orar, tal como lo relatan muchos hechos del Evangelio… Se retiró a orar.
El Padrenuestro
En Tierra Santa, en Jerusalén, cerca del Monte de los Olivos, encontramos la Iglesia llamada del Pater Noster, ubicada en el lugar dónde Jesús enseñó a sus discípulos esta oración. En el atrio y jardín, las paredes están cubiertas de murales de baldosas, allí se puede leer el Padrenuestro en muchísimos idiomas del mundo, por supuesto está en español, catalán, otros derivados latinos, y en euskera. Es muy emocionante leer el Padrenuestro en tu lengua materna, todo el mundo lo busca.
El Compendio
Destacaré algunos puntos
Punto 579. Dice: Es el resumen de todo el Evangelio; Es la más perfecta de todas las oraciones; recoge en forma de oración, el contenido esencial del Evangelio.
Punto 580. Dice: Se llama la Oración del Señor, porque nos la enseñó el mismo Jesús.
Punto 582. Dice: A través del Padrenuestro nos acercamos a Dios Padre con plena confianza, nos introduce en la presencia del Padre, y hace de nosotros hijos de Dios, podemos rezarlo con la certeza de ser amados y escuchados.
Punto 584. Dice: Al decir NUESTRO expresa una relación con Dios totalmente nueva y Él es nuestro Dios ahora y por siempre. En Cristo, nosotros somos su pueblo, y Dios es Nuestro Padre.
Punto 585. Dice: Rezar a nuestro Padre, es rezar con todos los hombres en favor de toda la humanidad para que conozcan al único y verdadero Dios y se reúnan en la unidad.
Volviendo a Jerusalén, se sabe que es el lugar del mundo donde la intensidad de la oración a Dios Padre es extrema porque allí todos sus habitantes rezan y los visitantes y peregrinos también: los cristianos católicos, ortodoxos, coptos, armenios y cuando hay peregrinaciones todos los miles de visitantes, los cristianos protestantes, entre otros. También rezan a Dios Padre, la comunidad musulmana, y por supuesto los judíos.
Las peticiones del Padrenuestro: Son siete
Lo más sencillo del Padrenuestro son las peticiones porque al rezarlo las pronunciamos repetidamente. Los puntos son del 587 al 598.
Las tres primeras son peticiones teologales y las cuatro restantes son peticiones de misericordia y de esperanza.
Analicemos los contenidos del Padrenuestro:
La expresión que Estás en el cielo no indica un lugar sino un modo de ser, Dios está más allá, es la Majestad y la santidad.
Santificado sea tu Nombre, es una alabanza, Nombre que fue revelado a Moisés y ha querido que su pueblo le fuese consagrado. Es una llamada a la santidad de todos y a que el Nombre de Dios sea conocido y bendecido.
Venga a nosotros tu reino, no solo significa el retorno de Cristo en la Gloria, sino además que la Iglesia pide que el Reino de Dios crezca aquí, gracias a la santidad de los hombres en el Espíritu.
Hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo, la voluntad del Padre es que todos los hombres se salven, le pedimos que una nuestra voluntad a la voluntad de su Hijo Jesucristo, como lo hizo la Santísima Virgen y los santos.
Danos hoy nuestro pan de cada día, le pedimos el sustento necesario para nuestra subsistencia. Con ello pedimos también la gracia en el obrar para que con justicia sepamos todos colmar las necesidades de los demás. Además, pedimos, saciar el hambre de la Palabra de Dios, de la Eucaristía y del Espíritu Santo, pues no solo de pan vive el hombre.
Perdona nuestras ofensas como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden, le pedimos que nos perdone porque nos reconocemos pecadores, y que por medio de los sacramentos obtengamos la redención. Pero para ello, tendremos que haber perdonado antes.
No nos dejes caer en la tentación, aquí pedimos al Espíritu Santo poder discernir entre la prueba que nos hace crecer en el bien o la tentación que nos puede hacer pecar, así como ser tentado y consentir.
Y líbranos del Mal, Cristo venció a Satanás, pero nosotros oramos para que la familia humana sea liberada del diablo y sus obras, pues el Maligno existe no hace vacaciones.
Amén, acaba así la oración y la redondeamos Que así sea lo que contiene la oración.
Acabamos con el rezo de la Oración para el fin de la Pandemia del Papa Francisco:
Oh María, tú resplandeces siempre en nuestro camino como un signo de salvación y esperanza. A ti nos encomendamos, Salud de los enfermos, que al pie de la cruz fuiste asociada al dolor de Jesús, manteniendo firme tu fe.
Tú, Salvación del pueblo romano, sabes lo que necesitamos y estamos seguros de que lo concederás para que, como en Caná de Galilea, vuelvan la alegría y la fiesta después de esta prueba.
Ayúdanos, Madre del Divino Amor, a conformarnos a la voluntad del Padre y hacer lo que Jesús nos dirá, Él que tomó nuestro sufrimiento sobre sí mismo y se cargó de nuestros dolores para guiarnos a través de la cruz, a la alegría de la resurrección. Amén.
Bajo tu amparo nos acogemos, Santa Madre de Dios, no desprecies nuestras súplicas en las necesidades, antes bien líbranos de todo peligro, oh Virgen gloriosa y bendita.
Tendremos un nuevo comentario el SEGUNDO MARTES DEL MES DE MAYO, EL 11 DE MAYO 2021, el cual tratará de la FAMILIA.
Comunicación Montalegre