Crónica enviada por Daniel Arasa. periodista
Emili Boronat, profesor de la Facultad de Humanidades y Comunicación de la Universidad Abat Oliba CEU, pronunció en la Sala de Actos de la Montalegre la conferencia titulada “Fe y Razón en el Cristianismo y el Islam”. Abundó sobre todo en lo referente al Islam.
En la presentación del ponente, Daniel Arasa, presidente de la Plataforma per la Familia, hizo referencia al deseo del ser humano de conocer la verdad, en todos los aspectos. Muchos conocimientos derivan de la observación, y, en general las fuentes del conocimiento son la razón y la fe. No hay contradicción entre ellas porque ambas han sido creadas por Dios y están encaminadas a la búsqueda de la verdad desde puntos de vista distintos y complementarios. Señaló que, sin la fe, la razón y la ciencia no llegan a conocer el sentido último de muchas cosas, en tanto que la fe sin la razón puede llevar al fanatismo.
El profesor Boronat. Entre otras muchas ideas, expuso las siguientes:
Islam
Mahoma (que murió en el año 632 de la era cristiana) nunca quiso que se recogieran por escrito sus enseñanzas. Esto no se hizo hasta el tercer sucesor, unos 30 años más tarde. Se recurrió a siete memoriones (personas que recordaban mucho de tales enseñanzas) y se procedió a la destrucción del resto de aportaciones.
El Corán no es “revelado”, sino literalmente “descendido” del Cielo. Según alguna tradición islámica ello se produjo en bloque, en lo que denominaron “Noche del destino”.
No hay sabiduría ni antes ni después del Corán. Éste no es una creación de Mahoma sino una retransmisión material a través del arcángel Gabriel.
El Corán no se interpreta, sino que se considera de naturaleza divina. No es interpretable ni es posible revisar en función del reconocimiento de épocas históricas. Interpretarlo del modo que sea es profanar lo divino, es blasfemia. Por ello no cabe una revisión crítica.
La revelación coránica es dogma fundamental.
En el Islam hay una profunda compenetración de componentes políticos, sociales y morales.
El Islam es una religión muy normativa. No lo practican tanto como vida privada, sino como ritual que da sentido de pertenencia. Hay un sincronismo colectivo muy decisivo, como se puede ver (por ejemplo) en la celebración de Ramadán o en la peregrinación a La Meca.
Para el Islam no existe un orden natural, sino que lo natural es ser musulmán.
Para el Islam hay fe en Alá y en sus enseñanzas, las cuales hay que aceptar con sumisión. No espacio para la razón.
Cristianismo
En el Cristianismo la revelación se hace a través de la historia y tiene su plena culminación en Cristo.
Dios (en el Cristianismo) inspira, revela, pero deja libertad.
Dios (en el Cristianismo) es amor, y el hombre está ante el abismo de la libertad. Puede rechazarle.
En el Cristianismo hay una relación entre lo natural y lo sobrenatural.
Actuar contra la razón va contra el querer de Dios, como dijo el papa Benedicto XVI en su discurso de Ratisbona.
Grecia enseñó a pensar, e Israel tuvo fe sin aportar una filosofía, pero ambas sirvieron para el Cristianismo.
Punto de encuentro
El profesor Emili Boronat considera que hay una diferencia diametral entre las dos religiones, y solo puede haber punto de encuentro si se habla de la naturaleza humana, ver qué lugar ocupa el ser humano en el mundo y en la misericordia de Dios. Hablar de ello dejando claras cuales son las posiciones.
Por el contrario, Boronat rechazó el multiculturalismo, por considerar que a lo único que lleva a que se vaya renunciando a unos aspectos y otros, incluso fundamentales. “Y ya se ve donde han caído las sociedades occidentales. Una muestra de ello es la reciente aprobación del aborto como un derecho por el Parlamento europeo”, afirmó, a la vez que puso en evidencia que para muchos musulmanes es escandalosa la forma de vivir de gran parte de la población de Occidente, que consideran una verdadera depravación.
Comunicación Montalegre