El reciente viaje del santo Padre Francisco a Israel, Palestina y Jordania ha constituido una apertura al diálogo en los diversos conflictos que en aquellos lugares se producen. La próxima visita en el Vaticano de los altos mandatarios Simon Peres y Abu Mazen es uno de los frutos más inmediatos. Pero, ¿Cómo se ha fraguado este asunto? En la entrevista que seguidamente presentamos con el periodista Henrique Cymerman, muy conocido en España por sus crónicas desde Israel, descubrimos unas gestiones importantísimas con un resultado más allá de lo esperado.
Por Irene Hdez. Velasco/El Mundo
“A sus 55 años Henrique Cymerman aún se da un aire a Tintín, el célebre reportero de los tebeos de Hergé. No es solo por su flequillo rubio, porque haya tenido un perro que se llamaba Milú o porque sea un veterano periodista. Al igual que Tintín este judío nacido en Portugal de padre madre española y padre de origen polaco y residente en Israel desde hace años ha dado el salto al otro lado, se ha convertido él mismo en noticia de la mano de una aventura increíble.
Ahí donde lo tienen este tipo tan familiar para muchos españoles (es corresponsal en Israel de Antena-3 desde 1991, y del diario La Vanguardia desde 1989) es el principal artífice en la sombra de la cumbre de paz que en un par de semanas -probablemente el 6 de junio- reunirá en el Vaticano a Simon Peres y a Abu Mazen.
Como en los episodios de Tintín, la suya es una historia alucinante que permite entender cómo se ha gestado esta cumbre de paz y echar un vistazo privilegiado al modo de funcionar de Francisco.
La aventura arranca en abril del año pasado, cuando Cymerman dio varias conferencias sobre Oriente Medio en España, Estados Unidos y América Latina. Una de ellas la pronunció en Buenos Aires y al finalizar la charla se acercó a él el rabino Abraham Skorka, gran amigo del Papa y a quien acompaña en este viaje a Tierra Santa como miembro del sequito papal.
A Skorka le había gustado mucho la conferencia de Cymerman, y le ofreció que acompañarle a ver al Papa y poder entrevistarle para un importante programa de reportajes de la televisión israelí que se emite los viernes y con el que colabora el periodista.“Skorka me dijo que el Papa quería mandar un mensaje al pueblo judío”, nos contaba ayer el reportero.
Al día siguiente de ese primer contacto, Skorka le mandó un email a Cymerman anunciándole que el Papa les recibiría en el Vaticano el 7 de Junio. Pero justo ese día el periodista tenía otra cita a la que no podía faltar: se casaba su hija mayor. “Skorka se lo comentó al Papa. Francisco me dio la enhorabuena a través suyo y cambio la cita para el 13 de Junio”.
Ese día Cymerman y el rabino Skorka no faltaron a la convocatoria y se presentaron puntuales en la casa Santa Marta, la residencia del Vaticano donde vive Francisco.
Cymerman y su cámara comenzaron a grabar al Papa, y utilizaron luego el material para un reportaje de televisión que luego se tradujo a cinco lenguas. El pontífice, al concluir al entrevista, les invitó a almorzar en el comedor de Santa Marta, y al acabar la comida hizo llamar a Cymerman. Estuvieron hablando una hora, sin cámara. El periodista le contó por ejemplo al Papa que de niño había estudiado en los marianistas y que una vez un sacerdote no le había dejado jugar al fútbol con los demás críos por ser judío. Al Papa, según cuenta en su último numero la revista portuguesa Visao, se le humedecieron los ojos y le dijo a Cymerman: “Es para evitar que se repitan historias como esa para lo que estoy aquí. El antisemitismo es un pecado”.
Visita a Tierra Santa
En ese mismo primer encuentro, el Papa le preguntó al periodista qué podía hacer por Oriente Medio “Yo le dije que en primer lugar visitar la zona, porque siendo él como es eso lanzaría un mensaje importante”.
Francisco le devolvió entonces la pelota: “¿Tú me ayudas?”, le preguntó.
Comenzó así una colaboración entre el Papa y el reportero. Hace siete meses, con otras personas entre las que destaca el rabino Skorka, comenzaron a trabajar a toda máquina en la visita del Papa a Tierra Santa.
Cymerman echó mano de sus excelentes contactos al más alto nivel entre palestinos e israelíes y comenzó a hablar con Simon Peres, con Abu Mazan…Tan buenos que, según cuenta la revista Visao, en su primer encuentro el Papa le comentó al periodista que tenía la invitación de Simón Peres para ir a visitar Israel, pero no la de las autoridades palestinas.
Cymerman llamó por su móvil al portavoz de Abu Mazen y en cuestión de minutos la invitación al Papa a visitar los territorios palestinos se materializó. El reportero volvió luego al Vaticano en otras tres ocasiones para reunirse con Francisco. La última, hace sólo tres semanas.
“No soy el único, ni muchísimo menos que ha echado una mano en este viaje. Pero he ayudado en algunas cosas”, admite.
La idea era tratar de aprovechar el viaje del Papa a los territorios palestinos y a Israel para tratar de impulsar un encuentro entre los líderes de esas dos partes, en un momento en el que las negociaciones se encuentran en profunda crisis. “Este es uno de los momentos más difíciles que yo recuerdo desde la segunda intifada, el proceso de paz promovido por Estados Unidos se encuentra completamente estancado, sobre todo porque nunca reunieron a las dos partes en conflicto”, señala Cymerman.
´Tienes carta blanca´
A pesar de los esfuerzos de todas las personas implicadas con el Papa en tratar de promover un encuentro de paz entre Peres y Abu mazen durante la visita de Francisco a Tierra Santa, el ambiente es tan malo que no lo consiguieron. Pero el viernes, el día antes de que comenzara el viaje del Papa, lograron que las dos partes acordaran encontrarse en el Vaticano en dos semanas, probablemente el 6 de junio próximo.
Cymerman cubre este viaje para una cadena de televisión israelí y era uno de los 70 periodistas que han viajado con el Papa desde Roma a Tierra Santa. Cuando Francisco fue a saludarle, como hizo con todos los demás periodistas, algunos colegas de Cymerman oímos que le decía: “Adelante, me gusta la idea, tienes carta blanca para eso”. Y luego, al volver a pasar junto a él, añadió: “En dos semanas”. Ahora queda claro que estaban hablando del encuentro de paz entre Peres y Abu Mazen.
“Francisco tiene unas dotes de liderazgo increíbles, centraliza todo, controla todo. Ha sido él quien ha pensado en todo, él ha hecho el programa del viaje como si fuera un artesano. Yo conozco a muchos líderes, y en mi opinión está por encima de todos ellos. Sólo está a su altura Simon Peres, a quien Francisco admira profundamente”, afirma.
De hecho, si el encuentro entre el presidente israelí y el palestino se va a realizar dentro de dos semanas no es sólo para aprovechar el tirón del viaje de Francisco a Tierra Santa, sino también porque Peres dejará de su cargo a finales de julio próximo.
“Yo no creo que de la reunión en el Vaticano entre Simon Peres y Abu Mazen se pueda esperar a corto plazo la paz. La paz no se consigue de un día para otro. Pero creo que si puede provocar un cambio en la atmósfera, que ahora mismo es muy mala. La invitación que les ha hecho el Papa es un gesto, sí. Pero un gesto importante y sobre todo valiente”, asegura Cymerman, que no oculta su admiración profunda hacia Francisco”.
Entrevista con Henrique Cymerman publicada en Religion y Libertad
Comunicación Montalegre