Quien fuera la mano derecha de Juan Pablo II desde 1981 hasta el mismo día de su muerte, será el encaragado de elevarlo a los altares el próximo día 1 de mayo. Benedicto XVI conoce bien al futuro beato. Cuando era sólo cardenal decía: “fui inicialmente atraído por la directa y abierta sencillez humana y la calidez que emanaba”. Ante Juan Pablo II, “uno se sentía ante un hombre de Dios” (Seewald, Peter, Una vida para la Iglesia, Madrid 2007, Palabra, página 96).
En sus intervenciones, Benedicto XVI lo ha definido con palabras como fidelidad, entrega, firmeza o caridad. Ha explicado cómo fue valiente, con una fe sencilla, y cómo se enfrentó al mal en el mundo y cómo abrazó la cruz. Destaca su prodigalidad, su amor a la Virgen y su faceta mística. Ha analizado los momentos más importantes de su biografía, como su sacerdocio, su ordenación episcopal o su llegada a la cátedra de Pedro. He aquí una selección de textos de Joseph Ratzinger-Benedicto XVI sobre Juan Pablo II, que pueden acercar una personalidad cuya actividad tuvo un alcance arrollador.
– La sensibilidad espiritual y mística
– Un papa alemán tras un papa polaco: ¿providencial?