La iglesia de Santa María de Montalegre tiene devoción a esta Virgen desde los inicios del siglo XX y lo fue cuando las hijas de la Caridad de Sant Vicente de Paúl estrenaron la capilla en su honor, la cual hoy en día se conserva básicamente igual, pero con las mejoras y reparaciones que han sido necesarias a lo largo del tiempo. En Montalegre se ha venido celebrando y recordando así los orígenes cristianos de Europa desde hace muchos años, y en esta ocasión también se celebrará el triduo después de la Misa de las 18 horas, los días 25, 26 y 27 (jueves, viernes y sábado) de noviembre.
Esta advocación se inició cuando el 18 de julio de 1830 la Virgen Santísima se apareció a una novicia, Santa Catalina Labouré, en la víspera de la celebración de San Vicente de Paúl, y allí sentada en un sillón la Virgen Santísima le habló diciéndole que se creara la cofradía de les Hijas de María. Posteriormente el 27 de noviembre fue cuando le dijo que hiciera hacer una medalla (en las características que ya conocemos) y que todo el que la lleve con fe recibiría gracias abundantes. La capilla de las apariciones está en París, calle Rue du Bac 140, un lugar de peregrinaje, incluido dentro de las rutas marianas más conocidas.
La distribución de estas medallas es constante en todo el mundo. Suele ser costumbre en todas las capillas donde hay devoción dejar cestitas con medallas y estampas que van desapareciendo y van a parar a otras manos donde se inician nuevas devociones y saludos a la Virgen.
Isabel Hernández Esteban
Manuel
me gustaría saber donde se vende estas medallitas de aluminio al por mayor,